Un hombre de el Estado de México se dedicaba a la venta de barbacoa todos los domingos en un mercado que se ubica en el municipio de Naucalpan.
Todos lo conocían como un hombre trabajador, responsable y educado.
Carmelo tenía 32 años y vivían con la mamá de su esposa en el molinito.
Según vecinos todos los días su suegra lo ofendía, por qué decía que no merecía a su hija.
Su hija vende Chicharones afuera de la escuela de sus hijos muy cerca de su domicilio.
Desafortunadamente no se han podido independizar y siguen viviendo en casa de su suegra.
Carmelo ya estaba arto de los malos tratos de su suegra y un día común y corriente paso algo espeluznante.
Carmelo ya no aguantó más los insultos de su suegra así que hagarro un palo con un clavo que tiene y le dio muerte a su suegra.
Como no sabía como desaparecer el cuerpo se le ocurrió la magnífica idea de hacerla barbacoa.
La metió en agua hirviendo la peli y la echo al oyó para cocinarla.
Lo más espeluznante es que la metió a su camióneta ya cocinda un día antes de ir a vender y la sirvió a sus clientes.
Su hija desesperada de no encontrar a su mamá pidió ayuda a las autoridades correspondientes .
Tras hacer la investigación encontraron huesos de partes humanas, al analizarlos determinaron que era la mujer desaparecida.
El hombre fue condenado a 30 años de prisión, la hija quedó en shock y los hijos se los llevó el DIF.
Foto tomada de internet créditos a quien corresponda
